De vuelta! y con recomendación.

Lo sé, han pasado 7 meses desde mi última actualización, pero estos 7 meses han sido muy moviditos como para pararme a contaros nada.

En este tiempo se han arreglado muchas cosas, la más importante la salud de un familiar que hace que ya estemos más tranquilos. He encontrado trabajo, no sin antes pasar por más de 30 entrevistas, de las que solo recibí respuesta de 5. Muy poca educación y empatía tienen los RRHH que no son capaces de sacar un minuto en enviar un email y decir: no sigues en el proceso. No soy imbécil y después de 1 mes se que se han olvidado de mí, pero qué menos que contactar con el candidato…en fin.
Las Jornadas Cifujazz de este año en Elciego con Jorge Pardo fueron un éxito, aunque acabé agotada. El merchandising, la publicidad, tesorería, pagar estancia, bla, bla, bla hizo que no pudiera más. Espero llevarlo mejor este año. Las Navidades muy cortas, visitas fugaces y mucha pena por no estar más cerca de mi madre, hermana y mis sobris.
La abuela ha cumplido 97 años y está mejor que tú y que yo juntos.

Y Maia, pues feliz, lidiando con sus trastadas, con su fase enfadada con el mundo y sus achuchones mortales a Jazz y Guantes.

Después de este breve resumen de ausencia os vengo a recomendar una serie:

“El método Kominsky”. 

Solo llevo 2 capítulos, pero con lo que he visto puedo decir que es GENIAL.
Michael Douglas y Alan Arkin, dos actorazos como la copa de un pino, te llevan a su terreno. Te hacen sentir que estas dentro de la serie, te sale la carcajada instantánea. Parece que la pullita o el puñal te lo están clavando a ti, te ríes y sufres con ellos. Pocos actores te hacen sentir así.

Y si, su creador es Chuck Lorre, pero no os equivoquéis, no tiene nada que ver con Big Bang, Mom, o sus anteriores series, esto es una comedia triste con unos actorazos que lo bordan.